27 junio 2010

Antoni Gaudi


Nació en el año 1852, siendo un arquitecto catalan con un sentido innato de la geometría y el volumen, así como también la capacidad imaginativa que le permitía proyectar mentalmente la mayoría de sus obras antes de plasmarlas a los planos.

En lugar de dedicarle tiempo a observar los detalles en los planos, Gaudi prefería moldear cada detalle en su cabeza y proyectar una maqueta en su mente en donde jugaba con cada forma y volúmenes recreando e improvisando, dando a su vez, instrucciones a sus colaboradores sobre lo que tenían que plasmar en el proyecto.
Su poder de intuición y capacidad creativa lo llevaba a entender mejor cada proyecto, atendiendo tanto a las soluciones estructurales como las funcionales y decorativas.

La obsesión por el detalle en sus creaciones lo llevo a introducir nuevas técnicas en el tratamiento de los materiales, como su famoso “trencadís” hecho a base de piezas de cerámica de desecho.